lunes, 11 de abril de 2011

MI CONVERSACIÓN CON UN MOSQUITO.


Me acaba de picar un mosquito… enorme. Cuando lo descubrí estaba en plena faena, llenando su enorme panza con mi sangre.

-       ¿Estás loco? – le dije - ¿Qué haces?
-       Comiendo – me dice - ¿Por?
-       Porque es mi brazo y mi sangre y estoy a punto de reventarte la cabeza. Por eso.
-        Pero ¿Qué más te da? Si tienes un montón de sangre.
-       Si, pero es MI sangre. No TU sangre.
-       Necesito comer si no me voy a morir. 
-       Si sigues comiendo de mi brazo te voy a matar. Tu elijes.
-       No te va a doler, te puse una anestesia.
-       Si, pero luego te vas, me queda una roncha y me pica durante una hora.
-       Ya, pero por una hora de rascarte no te vas a morir, sin embargo si yo como, puedo vivir y así puedo continuar con la especie.
-       ¡Me da igual tu especie! Es mi sangre y ¡no la voy a compartir!
-       ¿Tu tomas café? Cuidado con el café que pone muy nervioso y no es bueno para la salud.
-       Uno… dos….
-       Egoísta.
-       ¿Egoísta por qué? Lo que es mío es mío. Además vete tu a saber dónde has metido ese aguijón.
-       En ningún sitio, es la primera vez que pico a alguien y eres una grosera.
-       Grosera ¿yo??? Lo que faltaba…
-       Solamente quería un poquito de sangre.
-       ¿Es la primera vez que picas a alguien?
-       Soy chiquito.
-       Eso es obvio.
-       Chiquito dentro de mi especie, tengo nueve años, para tu “mundo”.
-       Si que eres chiquito si…
-       Si.
-       Escucha: Si me picas luego me duele ¿Entiendes?
-       Grosera.
-       Oye…
-       Grosera.
-       Escucha! Ufff…¿A qué te refieres con “poquito"?
-       Unas dos gotitas.
-       Tsé…
-       Tienes litros y litros…
-       MIS litros.
-       Dos gotitas vendrían a ser 0,0003 onzas.
-       ¿Si? 0,0003 onzas para TU mundo o el MIO?
-       Ahora no la quiero.
-       Venga…
-       A ver si me voy a contagiar.
-       ¿¿A contagiar de que??
-       De grosería humana.
-       Vamos, no seas tonto, termina de chuparme la sangre.
-       No. Sangre grosera… Puajjjj! que asco.
-       Vamos hombre, que lo necesitas…
-       No necesito sangre “grosera”.
-       Que no es grosera, anda….
-       Que asco, quítamela, quítamela…
-       Oye, piensa en tu familia, al fin de cuentas es sangre, bebe…
-       Puaj!… pensar en algo bonito, pensar en algo bonito, pensar en algo bonito, pensar…
-       Estás exagerando. Es una rica sangre…
-       … en algo bonito, pensar en algo bonito… pensar en alg…
-       … por favor…
-       … go bonito pensar en…
-       … no estará tan mala
-       …algo boni….slup! slup! Slup!...
-      
-      
-       ¿Te gustó?
-      
-       ¿Hola?
-      
-      
-       Si.
-       Sí ¿qué?
-       Rico.
-       Bueeeeno. Gracias.
-       Gracias ¿por qué?
-       Por haber dicho que mi sangre era rica.
-       Yo no he comido tu sangre… puaj… que asco…
-       Si lo has hecho. Y me has dicho que era rica.
-       Que no lo he hecho. Puaj… 


HELADO DE CREMA CON CHOCOLATE CALIENTE (y Cava) 

También por puro instinto, este domingo se me dió por comer un enorme helado de crema y luego seguir diciendo que no lo he hecho porque estoy a dieta.

Y fue bastante sencillo, compré chocolate de taza, lo preparé muy espeso con algo de leche. Serví el helado de crema y luego lo bañé con unas líneas de chocolate. Podría haberlo acompañado de agua, pero no, ya que estábamos tirando la dieta por la ventana, descorchamos un cava riquísimo.

Un gran momento, de un momento cualquiera. Te lo recomiendo.


-       ¿Con qué se hace el helado?
-       Con leche básicamente ¿por?
-       No, por nada. Pobre vaca ¿no?
-       Alto, alto, alto, que ya se por donde vas… Una cosa es chupar sangre y otra ordeñar leche. Además la Vaca tiene litros y litros…
-       “Sus” litros, tengo entendido.
-       Oye…
-       ¿También era grosera la vaca?
-       Que te he dejado chupar mi sangre!
-       ¿Sangre? ¿Que sangre? Yo no chupé ninguna sangre. Dios me libre. Y deberías dejar de hacerle eso a las pobres vaquitas. También existe la leche de soja.
-       Tu empieza a chuparle la savia a las plantas y yo me paso a la leche de soja.
-       Grosera.
-       Ingrato.


6 comentarios:

LA COCINERA DE BETULO dijo...

Muy simpática tu historia con el mosquito, aunque ese helado se apetece mucho.
Besos.

Susana Terrados dijo...

Querida amiga...estas divinamente loquita. Esta conversación humano-mosquito es digna de guardarse en la historia...jeje
Y, encima te llama grosera...son todos unos ingratos...los chupadores de sangre incluyendo a los humanos.
Me encantón ese "deliz" alimenticio tuyo, acompañado por cava...qué rico.
Besotes.

Carol dijo...

Hola!!

he visto que te has hecho seguidora de mi blog y he venido a curiosear jeje,
tienes una página muy interesante y la historia del mosquito ha sido muy divertida!

Un helado fantástico!

Me quedo por aquí dando una vueltecita!

Un beso!

NN dijo...

Muy creativo, veo que tenés un ingenio fuera de lo común, no conocía tu blog, lo descubrí al hacerte seguidora del mío, me alegra mucho que hayas llegado hasta las mil y una...
Nos leemos, un abrazo!

El Herrero dijo...

esto te dá muy seguido? jajajaja, juajuajuajua grosera...ingrato... jajajaa que buen delirio,espectacular me encantó jajajajaa,felicitaciones da placer leerte, saludos

Anónimo dijo...

lo del mosquito no tiene nombre. sencillamente genial!!!! koke.